Seguramente has colocado cientos de rollos de papel pintado durante tu trayectoria profesional si te dedicas a la pintura y decoración.
El papel pintado sigue estando en plena forma con muy diversa oferta de acabados y texturas, que los decoradores siguen aplicando para aportar vida a elementos concretos en sus proyectos.
Aquí daremos un repaso a los diferentes tipos de este elemento decorativo que continúa presente en nuestros interiores: el papel pintado.
Veamos los diferentes tipos de revestimientos murales
Lo cierto es que llamarlo papel y decir que está pintado son denominaciones que vienen del pasado, pero que no hacen justicia a la variedad de revestimientos disponibles hoy en día.
Mira aquí las diferentes variedades.
Papel pintado tradicional
Es un papel especialmente concebido para pegar en paredes que se imprime en su fabricación con diferentes patrones y diseños.
Su superficie es lisa, sin relieve, y tiene poca resistencia al roce y al lavado.
Papel tejido no tejido
Este curioso trabalenguas describe un papel de pared formado por dos capas:
- Una interna (la que va pegada a la pared) que es realmente el papel.
- Y otra externa (la que vemos una vez colocado) que está formada por diversas fibras sintéticas o vinílicas que simulan un tejido no siéndolo realmente.
También es conocido como non woven. Así que mira bien la etiqueta y si no dice “TNT” o “tejido no tejido”, puede que lo llamen por su denominación en inglés.
Papel vinílico
Similar al anterior, está formado por dos capas de material, siendo la externa una capa de vinilo que generalmente aporta relieve con interesantes texturas que no se pueden conseguir con un papel normal o un TNT.
Es muy resistente al roce y al desgaste además de ser muy lavable.
Revestimiento vinílico
Aquí hay que tener cuidado de no confundirlo con el papel vinílico.
El revestimiento vinílico está compuesto de una sola capa de fibras vinílicas que forman en sí un tejido que no es realmente un papel.
Sus prestaciones son muy elevadas, con una gran resistencia al roce y al lavado.
El resultado visual es muy similar al de telas de gran impacto estético por lo que es muy utilizado en hoteles o residencias de calidad premium. Es lo que se conoce como revestimiento “contract”.
Revestimiento de fibras naturales
Se compone de dos capas: una interna de papel y una externa que consiste en un tejido de fibras naturales como lino, yute, bambú, rafia, corcho, madera, etc…
Gran parte de su encanto radica en la irregularidad de sus colores y formas, por lo que no hay dos piezas iguales y cada una de las tiras instaladas se puede distinguir claramente de las contiguas.
Papel pintable
Se trata de un papel en acabado totalmente blanco, que presenta una textura o diseño de patrones geométricos en relieve.
Está creado para poder ser pintado con cualquier pintura de interiores una vez colocado y seco.
Revestimientos de imitación a tela
Existen algunos acabados en tejidos sintéticos que simulan telas o terciopelos, en colores lisos o en patrones florales o geométricos.
Son de los menos utilizados actualmente por sus connotaciones estéticas algo anticuadas.
Pero es un material a tener en cuenta para según que aplicaciones como acentos decorativos en pequeños elementos arquitectónicos.
Foto-murales y papeles impresos a medida
El foto-mural es el hermano del papel pintado. Se basa en el mismo material que un papel pintado normal, aunque actualmente también se fabrican foto-murales sobre base de tejido no tejido.
Mediante impresión digital en tiras numeradas, se consigue formar una imagen completa en toda la pared (a modo de puzle).
Podemos diferenciar dos tipos de murales:
- El foto-mural: que recrea una imagen fotográfica real.
- El mural impreso: que forma una imagen o dibujo no correspondiente a una fotografía.
La mayor ventaja de los murales es que se pueden personalizar encargando una impresión a medida, con la imagen deseada y adaptada a las medidas exactas de la pared.
¿Dónde es mejor instalar cada tipo de papel o revestimiento mural?
En zonas de uso moderado podemos emplear cualquiera de los papeles disponibles, aunque estos sean de los más delicados.
Si lo que quieres es revestir con papel el baño o la cocina, debes saber que sí es posible. Pero para ello te has de decantar por un papel vinílico que resista el roce y la humedad.
Si el aspecto algo “plástico” del vinilo no te convence del todo, también podrías instalar sin miedo un papel tejido no tejido, ya que estos son también lavables en su superficie, aunque algo menos resistentes.
En zonas de mayor uso, con riesgo de roces y golpes, como son los pasillos, recibidores y entradas, lo recomendable es instalar aquellos revestimientos que tienen en su cara exterior una capa vinílica.
Y en el extremo de las altas prestaciones, encontramos actualmente algunos fabricantes que disponen de papeles resistentes al agua, con aplicaciones tan curiosas como revestimiento de fachadas, paredes de interior de duchas y… ¡Hasta papel pintado para suelos!
¿Y a ti? ¿Te gusta el papel pintado?
Si eres un maestro pintor seguro que has notado el auge del papel pintado en los últimos tiempos.
Es raro el proyecto decorativo que al menos no lleve una pared empapelada, ¿verdad?
Nos gustaría saber qué herramientas Pentrilo para papel pintado son tus favoritas y por qué.
Cuéntanoslo en los comentarios.
Artículos de interés
Como limpiar rodillos y brochas de pintura
Como pintar un gotelé con rodillo
Pliolite, siloxano y silicato. Diferencias entre revestimientos de fachadas.
Filtros